He leído esta noticia en Religión digital y me parece interesante publicarla para haceros participes de la labor de Cáritas

Según explicó el secretario general de Cáritas, Sebastián Mora, "lo esencial no son los números ni las estadísticas, sino las personas que hay detrás de esos números. Tras ellos, hay vida, drama, gozos... Hay familias, hay alegría, hay narraciones...".
Los datos, empero, muestran una realidad descarnada. Más de 950.000 personas acompañadas, de las que 300.000 acudieron por primera vez a Cáritas. Medio millón de hogares se encuentra sin ingresos. Y, quizá la cifra más alarmante, mirando hacia el futuro: "la mitad de la población española se encuentra en situación de vulnerabilidad", apuntó Francisco J. Lorenzo, coordinador del equipo de Estudios de Cáritas.
Ello no significa que haya riesgo de pobreza para todos, pero sí que uno de cada dos españoles nos encontramos afectados por algunos factores de exclusión, o manifestamos problemáticas sociales que, "si la situación de crisis se intensifica, pueden pasar a situación de exclusión". Dichos factores giran en torno a tres ejes: el económico (empleo, consumo, paro...); el de los derechos sociales (voto, vivienda, educación, salud, acceso a servicios sociales...); y el eje relacional (apoyo familia).
"La crisis nos ha afectado a todos, pero con especial intensidad a aquellos más vulnerables y excluidos", recalcó Sebastián Mora, quien insistió, usando palabras de Benedicto XVI, en la necesidad de afrontar la situación "con inteligencia cargada de caridad, y con caridad cargada de inteligencia".

El informe también denunció la fragilidad del sistema de protección social, y la falta de respuestas de los servicios sociales públicos. De hecho, el 67% de las personas que llegan a Cáritas en atención primaria lo hacen derivadas de dichos servicios sociales. "Hemos duplicado las inversiones a este tipo de ayudas, llegando a 30 millones de euros, fundamentalmente en alimentación y vivienda", señaló Lorenzo.
Para Sebastián Mora, las respuestas más urgentes se pueden resumir en cuatro puntos: "Primero, tenemos que mirar la sociedad desde aquellos que han quedado en la orilla, los últimos y no atendidos; Segundo, solicitar más inversión en políticas sociales; Tercero, una mayor coordinación y estrategia de coordinación con otras organizaciones sociales; Cuarto, una mayor participación de las personas que están padeciendo la pobreza y la exclusión en la definición de las políticas sociales, que siempre han sido el paradigma de todo para el pueblo, pero sin el pueblo".